Una de las mejores opciones que existen en el mercado, para separar todo tipo de ambientes, sin que sea necesario recurrir a un tabique de ladrillos, son los bloques de vidrio. Estos bloques, que podemos encontrar en una gran cantidad de colores y formatos, son perfectos para dividir esos espacios que necesitan algo más de intimidad, sin tener que perder la iluminación natural.
Construir un muro con este tipo de bloques o ladrillos de vidrio, es una tarea tan sencilla, que puede llevarla a cabo cualquier tipo de persona, con unos conocimientos básicos de albañilería. ¿Qué pasa si no tengo ni idea, pero quiero colocar algunos en mi hogar? Absolutamente nada, ya que los kit que hay en el mercado, vienen con una guía de instrucciones, para conseguir llevar nuestro proyecto a un feliz desenlace.
Pero no solo son útiles para construir muros o muretes de separación, también se pueden crear con ellos, interesantes efectos decorativos, incrustándolos en cualquiera de los muros que formen parte de la casa.