El hierro, metal y las aleaciones de este último son objetos que transmiten frío para aquellas personas que están cerca de ellos. Una cama ha de ser un lugar que tenga un calor confortable y permita dormir a gusto a una persona, de manera que un soporte de metal no es la opción idónea para una cama.
Entonces, ¿qué soporte es mejor? Lo mejor sería optar por soportes de madera para la cama. Estos soportes, además de dar un calor casi humano, mejoran mucho el aspecto de una habitación y pueden ser hechos de cualquier forma. De esta manera se consigue adaptar este nuevo soporte al estilo con el que ya cuenta toda la habitación.
Lo mejor de todo es que si te gusta trabajar puedes hacer tu propio soporte de madera para camas. No hace falta más que una cierra y clavos o tornillos para poder sujetar las maderas. Eso sí, si no te gusta mucho la idea de armar tu propio soporte para la cama siempre puedes comprarlo en alguna tienda, los puedes encontrar de todas las formas y diseños, tanto si quieres algo rústico como si te decantas más por el estilo moderno de este nuevo siglo.